Seguidores

viernes, 8 de octubre de 2010

Perdido en el silencio






PERDIDO EN EL SILENCIO:
Capitulo 3 Continuación.
Carta de confesión.

Te deje abandonado en el silencio y yo quede atrapada en un mundo como si no me perteneciera, soy como una pieza de puzle que no encaja en su lugar, mi cuerpo está en esta vida pero siento como si mi mente, mi alma me hubieran abandonado ó mejor dicho se quedaron contigo el día que te dije adiós.
Tonta de mi creyendo que te olvidaría y seguir con mi vida como si nada, he engañado a mi cuerpo durante unos meses, pero me he cansado de luchar en una batalla perdida, cada día que pasa te echo más de menos, estas en mis sueños, en mis pensamientos y no puedo sacarte de mi vida, ahora me doy cuenta que formas parte de ella; Porque no podría tener dos vidas paralelas en una donde pudiera ser la madre y esposa feliz y en otra donde pudiera perderme contigo en tu silencio, se que las dos vidas en una no las puedo juntar, lo intente hasta casi destruir mi matrimonio y destruirme yo.
Siempre he pensado que solo hay un amor sincero y que jamás se podría amar a dos personas a la vez, desde que te abandone siento un vacio en mi pecho y un dolor punzante que siento que me falta el aire, sé que muchos de mis miedos aparte del dolor que me causaba verte era que empecé a sentir algo por ti difícil de explicar, ya no te veía como mi paciente, eras mi amigo, un amigo por el que empecé a sentir algo más, no solo a ti se te ponía la piel de gallina cuando te tocaba, no solo a ti se te dispara los latidos de tu corazón.
He soñado mil veces caminando juntos abrazados,
He soñado mil veces con unir mis labios en los tuyos,
He soñado mil veces con tu risas junto a las mías,
He soñado mil veces con unir nuestros cuerpos y fundirnos en uno.
Estos sueños no son los comunes con un amigo, se que detrás de mi barrera que me forme, hay algo mas, mis ojos ya no te miraban igual, mi dolor no solo era por verte morir en una cama, mi dolor era porque sin querer me enamore de ti, estúpido ya lo sé, como poder enamorarse de alguien con quien no has hablado, enamorarse de alguien que se está muriendo que solo gracias a las maquinas a las que está conectado le mantienen con vida, si muy estúpido, me ha costado darme cuenta de ello, ó tal vez solo no quería reconocerlo, pero sirve de algo darme cuenta ahora, ni siquiera sé si sigues vivo ó si algún órgano tuyo a fallado y has muerto, la verdad no sé que me duele más si saber que sigues muriéndote en aquella habitación solo ó si has muerto y tu alma ya es libre sin tenerte atado a una vida de oscuridad atrapado en un abismó enchufado a unas maquinas, me he replanteado mucho todo lo que aprendí estudiando, pero como siempre la vida te da la mejor lección, las personas no somos Dios y no debemos jugar con el poder que nos otorga los conocimientos, que derecho tenemos a tener personas vivas a través de maquinas, que derecho tenemos a tener personas atrapadas en una vida en la que no pueden vivir donde sus lesiones son incompatibles con la vida, no hay derecho hacer sufrir durante meses ó años a personas que por mucho estudios científicos digan que ellos no sienten, ni piensan, se les tenga retenidos, que me expliquen como han hecho esos estudios científicos si no han podido hablar con nadie en esa situación, también se creía que las personas en coma no sentían ni oían hasta que despertó el primero y dijo que él había sido consciente durante todo el tiempo, y si este hecho es igual que crueldad por parte de los que hemos formado parte en conservarlos con vida a toda costa.
Sin más me despedido querido Esteban a la espera de tener un aliento de valor para ir a visitarte, tengo que preparar mi mente, se que ahora estoy débil y no lo soportaría, no sé si esta carta quedara en el olvido ó si tendré el valor suficiente para leértela a los pies de la cama como hacía antes con todas mis historias, tu siempre fuiste el primero en oír mis historias y mis confesiones.
Te quiero y necesito tu perdón por abandonarte, te abandone en cuerpo pero nunca en alma, siempre has estado presente en mi mente.